Ese impacto también ha tenido eco más allá de Estados Unidos. “Creo firmemente que los amantes del deporte en Latinoamérica saben lo que está pasando en Las Vegas y por supuesto eso ayuda a que el hockey tenga entrada en estos países. El crecimiento de los fanáticos del hockey y de la NHL en Latinoamérica es sorprendente y la historia de los Golden Knights, sus inicios, su visión y su éxito, atrae a muchos aficionados que comienzan a ver el hockey”.
Urresti entiende que el deporte de los patines y el disco, no busca competir con otras especialidades en la ciudad, sino más bien, convivir con ellas. “Que todos estos equipos estén en la misma ciudad que los Golden Knights es fantástico. Esto solo beneficia a todos, ya que habrá más aficionados en la ciudad y visitantes amantes del deporte que estarán viendo lo que ofrezca el otro”.
Latinoamérica, expansión y una semilla que empieza a crecer
Otro punto importante en la conversación con NHL Español, giró en torno a los avances y el desarrollo del hockey, sin desligarse de América Latina. “Comenzar sembrando la semilla en la región, darle acceso a estos países de tener en sus pantallas juegos de la NHL y en su idioma”. La visibilidad es el primer paso para derribar barreras culturales y climáticas que durante años limitaron la expansión del deporte.
En su análisis, el hockey cuenta con los recursos necesarios para conectar con las nuevas generaciones. “Los latinoamericanos somos muy apasionados, amamos los deportes, para muchos es un estilo de vida. Por supuesto el hockey tiene todos los elementos para ser atractivo para una generación que busca acción, rapidez e impacto”. Esa intensidad, tan familiar para el público latino, encuentra en el hockey un vehículo natural.
Eventos como la Amerigol Latam Cup representan, para Urresti, una oportunidad invaluable. “Que existan este tipo de eventos es estupendo para que crezca el hockey entre las nuevas generaciones. Esto es sembrar la semilla que seguro dará frutos en el futuro”. No se trata solo de competencia, sino de representación, de mostrar que el hockey también puede hablar español y portugués.
Su visión se vuelve aún más concreta cuando habla de Colombia. “Creo que lo que están realizando equipos como el Tampa Bay Lightning en Colombia tiene que ser replicado por los demás equipos en diferentes países del continente”. Para él, el talento deportivo colombiano es innegable. “Si la NHL sigue apoyando el crecimiento del hockey en Colombia, así como el gobierno apoye esta disciplina, en unos años podríamos tener el primer jugador colombiano parte de la liga”.
Incluso las experiencias difíciles forman parte de ese aprendizaje. Urresti recuerda con claridad lo ocurrido en Arizona. “Los Coyotes eran parte de la cultura deportiva del estado. La gente quedó muy triste con lo que sucedió con la franquicia, fue un momento difícil que como periodista también lo sufres, porque tenían mucha afición latinoamericana que quedó sin equipo”. Esa pérdida refuerza su creencia de que la representación importa, que los equipos no son solo negocios, sino anclas emocionales para comunidades enteras.