The Florida Panthers gather in celebration after defeating the Edmonton Oilers in Game Six of the 2025 Stanley Cup Final at the Amerant Bank Arena on June 17, 2025 in Sunrise, Florida. (Photo by Eliot J. Schechter/NHLI via Getty Images)

Catalogar como éxito rotundo la temporada de un campeón de la Stanley Cup podría parecer simplista. Eso no quita que lo sea. No importa lo que pasó antes, al momento de alzar la Copa se borra todo, y se llega al éxito.

Sin embargo, en el caso particular de los Florida Panthers, el camino que recorrieron para obtener su bicampeonato después de avanzar a su tercera Final de la Stanley Cup consecutiva, merece un reconocimiento mayor, por todas las ramificaciones que derivaron en el objetivo máximo.

Fue la continuación de un proyecto que inició con la llegada a las oficinas de Bill Zito como presidente de operaciones de hockey y gerente general en el 2020. Su impacto ha sido monumental — Zito es uno de apenas diez gerentes generales en la historia en ganar múltiples Stanley Cups en sus primeros cinco años en el puesto, marcando un antes y un después en la franquicia.

Él ha sabido presionar los botones correctos, desde el Draft hasta la agencia libre y los traspasos, orquestando una de las más notables transformaciones en la historia de la NHL.

En español: lo más destacado de la Final de la Stanley Cup

Para ganar dos Copas en fila y prolongar el éxito de un roster en un ambiente donde el tope salarial puede descarrilar cualquier proyecto a largo plazo, la complejidad es aún mayor. Si bien el núcleo principal conformado por Aleksander Barkov, Matthew Tkachuk, Sergei Bobrovsky, Sam Bennett y Sam Reinhart se mantuvo firme, la directiva no dudó en ajustar. Jugadores vitales en la conquista del primer título salieron del club, abriendo paso a otros nombres importantes en esa nueva carrera hacia la Stanley Cup, como A.J. Greer, Nate Schmidt, Tomas Nosek, y eventualmente, en la Fecha Límite de Cambios, a Seth Jones y Brad Marchand.

FLA@EDM J5:  increíble golazo Marchand

La campaña del 2024-25 comenzó oficialmente con la ceremonia de izado del banderín de campeones el 8 de octubre, un recordatorio constante del listón que ellos mismos habían establecido. La temporada regular fue un maratón, con viajes a Finlandia y una batalla constante en una competitiva División del Atlántico. La campaña fue un ejercicio de adaptación constante, con altibajos que incluyeron la lesión de Matthew Tkachuk en el “4 Nations Face-Off” que lo mantuvo fuera hasta los playoffs y la pérdida de la división ante los Toronto Maple Leafs.

A pesar de esto, terminaron terceros con un récord de 47-31-4 (98), debajo del Tampa Bay Lightning y los Maples, despidiéndose de la idea de la ventaja de localía a lo largo de los playoffs.

"Entras con una perspectiva terrible porque cuando ganaste el año pasado, la narrativa [general] es que debes ganar los 16 partidos de playoffs y los 82 partidos de la temporada regular. Pero entonces, esa emoción, ese nivel de energía, ya no tienes ese tipo de impulso de estar persiguiendo algo. También jugaste mucho hockey. Así que se trata de descifrar cómo manejar los días", comentó en su momento el entrenador Paul Maurice sobre la mentalidad de defender el título.

Ya en los Playoffs de la Stanley Cup, los Panthers demostraron su temple y madurez. Empezaron a arrollar a sus rivales estatales de Tampa Bay, en cinco juegos. Luego, enfrentaron el reto más duro de la campaña al perder los primeros dos juegos ante los Maple Leafs en la segunda ronda, una situación que puso a prueba su resiliencia.

“Estuvimos en problemas, perdiendo 2-0 ante Toronto, y la mayoría de tus muchachos entraron y cambiaron nuestra fortuna. Se habían ganado el derecho de estar en el hielo al final”, dijo Paul Maurice a sus jugadores de la cuarta línea al momento de asegurar el campeonato, haciendo referencia que fueron ellos quienes elevaron al club en esa situación ante Toronto.

Superada esa prueba, pasaron por encima a los Carolina Hurricanes en cinco encuentros en la Final de la Conferencia Este, hasta alcanzar su tercera final consecutiva.

EDM@FLA, SCF J6: Bobrovsky detuvo 28 tiros para ganar la copa

El portero Sergei Bobrovsky describió el camino en los playoffs: "Desde la primera ronda, [enfrentamos] a los equipos con las ofensivas más potentes. Toronto, [Boston], Carolina... todos los equipos eran muy duros. Edmonton, obviamente, fue un equipo increíble. Así que fue un gran desafío, pero, de nuevo, junto con nuestro grupo de muchachos, fue increíble".

La gran final fue un reflejo de lo que son estos Panthers: un equipo que entiende que nada es fácil y que hay salir con todo en cada partido.. La serie contra los Edmonton Oilers fue un constante pulso de alta intensidad, con 32 goles en los primeros cuatro partidos, convirtiéndola en una de las finales más anotadoras en la historia de la Stanley Cup. Tuvo dos juegos donde un equipo remontó un déficit de múltiples goles para ganar, y un récord de goles para empatar en el último minuto del período reglamentario.

Los Panthers se coronaron bicampeones al vencer a los Edmonton Oilers 5-1 en el Juego 6 en casa, un logro que los convierte en la décima franquicia en la historia de la NHL en repetir como campeones. Además, son el octavo equipo en ganar sus dos primeras Stanley Cups en su propio hielo, algo que no ocurría desde los Oilers en 1988.

El ataque de Florida en la postemporada fue formidable, anotando 80 goles, incluyendo 18 por parte de sus defensores, una cifra que los ubicó como el equipo con más tantos en los playoffs y el tercero con más anotaciones de sus miembros de la línea azul en una sola postemporada. Su Power Play (30.4%) y Penalty Kill (82.6%) fueron cruciales.

La cohesión y experiencia compartida, forjadas a lo largo de este camino, culminaron en el mayor de los éxitos. "Simplemente un grupo especial. Tenemos que ser una dinastía ahora", afirmó el delantero Matthew Tkachuk tras alzar la Copa. "Son tres años seguidos en la Final, dos campeonatos… Campeón de la Stanley Cup. Esto nunca pasa de moda”. Para el delantero Sam Bennett, JMV de los Playoffs, el logro fue aún más grande: “Esto es mucho más difícil de lo que pensé que sería ganar, y ganar dos veces. Estoy tan orgulloso de este grupo. Es increíble el equipo que tenemos aquí… Es la mejor sensación del mundo”.

FLA@EDM: Panthers aumentan la ventaja

Bobrovsky, por su parte, describió la emoción de repetir el título: “No se puede explicar. Es un sueño hecho realidad. Es asombroso”. Para él, el logro es fruto de un esfuerzo colectivo inmenso: “Es increíble porque ponemos muchísimo trabajo duro, y trabajamos juntos, y vamos a celebrar juntos. Así que es una sensación increíble que simplemente disfrutamos”.

Entonces, sí, la temporada de los Panthers fue un éxito rotundo, siendo ese el resultado de una serie de movimientos quirúrgicos que produjeron el nacimiento de una dinastía.

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