En 15 de esos 52 encuentros, Tkachuk había conseguido dos o más puntos, para poner en perspectiva la manera en la que estaba contribuyendo con la ofensiva de los Panthers.
Había preocupaciones acerca de si Tkachuk estaría de regreso en algún momento de la temporada, considerando que estaba en los planes que los Panthers clasificarían a los playoffs. Existía confianza en su retorno, pero los días posteriores a su lesión, cualquier panorama era incierto, salvo pensar que no estaría de regreso.
No obstante, el delantero logró recuperarse y reapareció justo a tiempo para el comienzo de los playoffs y su retorno a la alineación fue mejor de lo esperado y una de las razones por las que los Panthers lo esperaban con gran ahínco, ya que en el Juego 1 de la serie de Primera Ronda ante sus rivales estatales del Tampa Bay Lightning anotó dos goles y dio una asistencia, firmando un retorno más que exitoso tras una larga ausencia y que despejó dudas de inmediato.
A pesar de que en la serie de Segunda Ronda ante los Toronto Maple Leafs se fue en blanco en lo que a goles se refiere, Tkachuk volvió a hacerse presente en la hoja de anotación en la Final de la Conferencia del Este frente a los Carolina Hurricanes, con un par de goles confirmando el porqué era imprescindible para Florida tenerlo de vuelta para las etapas cruciales de la campaña.
Cabe resaltar que no todo fue miel sobre hojuelas para Tkachuk durante los playoffs, pues vivió una racha de 10 encuentros consecutivos en los que no fue capaz de encender la lámpara. Más tarde revelaría que durante la postemporada jugó en medio de lesiones y dolor que estuvieron cerca de hacerlo tirar la toalla.
Pero definitivamente Tkachuk se guardó lo mejor para el final. En el Juego 6 de la Final de la Stanley Cup ante los Edmonton Oilers, Tkachuk anotó el gol decisivo para que Florida sellara la serie por 4-2 y consumar así el bicampeonato de los Panthers y ayudar al club a establecer una dinastía, algo que no ocurre con frecuencia ni con facilidad en la NHL.
Tkachuk cerró la postemporada con una producción de un punto por encuentro, con 23 unidades en 23 juegos (ocho goles y 15 asistencias), estableciéndose como uno de los pilares del equipo, sacándole todo el jugo al hecho de jugar en una de las líneas principales, al lado tanto de Sam Bennett como de Carter Verhaeghe, convirtiendo a ese grupo en una pesadilla para sus rivales.
Pero Matthew Tkachuk no solo demostró que es un jugador que puede contribuir a la ofensiva, acumuló 46 golpes y forzó nueve pérdidas del disco en la zona ofensiva durante los playoffs, demostrando su otra faceta del juego, como una pieza que es capaz de alterar el resultado de un partido con otras herramientas con las que cuenta y por las que es tan apreciado.
Más allá de las estadísticas, su tenacidad, talento y presencia física en el hielo fueron ingredientes cruciales para el éxito de los Florida Panthers en la temporada 2024-25, especialmente en los momentos decisivos de los partidos importantes, el tipo de escenario para el que el mayor de los hermanos Tkachuk parece haber nacido y en el que encaja a la perfección.