Durante el tercer periodo, los Kings pusieron el juego de los Dodgers en la pantalla de la arena, mostrando ambos encuentros en pantalla dividida para que los aficionados pudieran seguirlos al mismo tiempo.
Los aficionados estallaron en emoción justo cuando se anunció el gol del delantero de los Kings, Andrei Kuzmenko, ya que coincidió con el cuadrangular del empate en la novena entrada de los Dodgers, conectado por Miguel Rojas.
"Se puso muy ruidoso. Ya sabes por qué se escuchaba tanto ruido, pero se volvió algo complicado tratar de mandar las líneas", expresó el entrenador de los Devils, Sheldon Keefe. "Por suerte, nuestro portero se mantuvo concentrado todo el tiempo".
Pero a lo largo del encuentro hubo mucho sabor azul por parte de los Kings. El organista del equipo, Dieter Ruehle, tocó las conocidas notas de "¡Vamos Dodgers!" durante el partido, tal como lo hace en los juegos de local de los Dodgers. Y, después de que se asegurara la segunda victoria consecutiva en la Serie Mundial, Ruehle interpretó la canción de celebración del equipo, "I Love L.A." de Randy Newman.
Con dedicatoria al cielo
También el sábado, Brad Marchand de los Florida Panthers hizo un gol que produjo una reacción conmovedora.
El delantero señaló al cielo en honor a la hija fallecida de 10 años de su amigo después de anotar un gol en el segundo período del juego contra los Stars en la Amerant Bank Arena.