Los Toronto Maple Leafs tuvieron que echar mano de sus equipos especiales para resolver un partido en su gira por California que se estaba complicando en demasía, entrando al tercer periodo con una desventaja de 1-0 ante Los Angeles Kings.
Apenas a los 24 segundos de iniciar el tercer periodo, las cosas pudieron haberse puesto peor para Toronto, pues John Tavares cometió un castigo por enganchar a un rival con su bastón (hooking), particularmente al capitán de los Kings Anze Kopitar, y los Maple Leafs, un gol detrás, empezaron el tramo final con la posibilidad de que su desventaja pudiera incrementarse.
No obstante, y aunque la contención de penalizaciones (penalty killing) no ha sido una de las cartas fuertes para Toronto en la presente temporada (16 en la NHL con 78.1% de eficacia), Auston Matthews consiguió su gol 29 de 2024-25, en situación de desventaja numérica, a los 55 segundos del tercer periodo, una anotación que marcó un punto de inflexión en el juego y que inició el regreso de los Maple Leafs, quienes acabaron ganando 3-1 a los Kings en la Crypto.com Arena.
Matthews hizo una maniobra en la zona ofensiva y, con un movimiento rápido, sacó un tiro por abajo que el portero de los Kings Darcy Kuemper no fue capaz de detener. Los Maple Leafs empataron el juego 1-1.
No obstante, los Kings solicitaron una revisión de una jugada controversial que precedió a la del gol, porque en esa secuencia, segundos atrás, el delantero de sangre mexicana habría golpeado el puck con su bastón por lo alto en su zona defensiva y había esperanzas de que la anotación fuera revocada.
“Estuvo cerca, verdaderamente muy cerca”, dijo el entrenador en jefe de los Maple Leafs Craig Berube, pero después de una larga revisión en la que desde el cuarto de situación de la NHL se determinó que el bastón de Matthews “no estaba por encima de la altura normal de sus hombros cuando hizo contacto con el disco”, de acuerdo con la Regla 80.1. Gol validado.




















