El 12 de diciembre, los Vancouver Canucks realizaron un traspaso sorprendente al enviar a la cara de su franquicia y uno de los mejores defensas de la NHL, Quinn Hughes, al Minnesota Wild, a cambio de los delanteros Marco Rossi y Liam Ohgren, el defensa Zeev Buium y una selección de primera ronda del Draft de la NHL de 2026.
Aunque muchos pensaron que con este movimiento la crisis de resultados de Vancouver en lo que va de la temporada se complicaría, hasta ahora ha sucedido todo lo contrario: los Canucks van en ascenso.
En la jornada del viernes, el conjunto canadiense venció 4-1 a los New York Islanders como visitante en la UBS Arena, consiguiendo su tercera victoria consecutiva, justo tras el traspaso de Hughes. Previamente, habían derrotado a los New York Rangers 3-0 y a los New Jersey Devils 2-1.
“Esta noche (viernes) tuvimos un buen comienzo. Queríamos presionar en la zona rival y los muchachos lo hicieron. Tuvieron mucha energía”, dijo el entrenador en jefe de Vancouver, Adam Foote. “Pudimos adelantarnos, apoyar a nuestro portero Thatcher Demko y liderar así, y fue la gran jugada temprana —el cinco contra tres— la que le dio mucha confianza a nuestro grupo”.
La racha de tres victorias consecutivas de Vancouver, en la que han superado a sus rivales 9-2, iguala su mejor marca de la temporada. La única otra racha de tres triunfos que ha tenido Vancouver esta campaña fue del 16 al 19 de octubre, cuando superaron a sus oponentes 11-8 en lo que fueron el cuarto, quinto y sexto partido de la temporada.





















