Luego de cursar por una pesada y desgastante racha de 13 derrotas seguidas en la temporada 2024-25 y que fue una carga demasiado grande como para recuperarse y meterse a posiciones de playoff, las cosas parecen estar dando un vuelco en la presente campaña 2025-26 para los Buffalo Sabres.
Con la también pesada carga que tiene la organización de atravesar por la sequía más grande en activo sin participar en la postemporada, que data desde 2011 (14 años y contando), los Sabres han tenido que lidiar con la presión de todo lo que ello significa, pero esta temporada parece que las cosas están cambiando.
Luego de vencer por 4-2 a los St. Louis Blues en el Enterprise Center la noche del lunes, los Sabres (20-14-4; 44 puntos) ligaron su novena victoria consecutiva, estableciendo un empate con la segunda racha ganadora más larga en la historia de la franquicia (que han conseguido en otras tres ocasiones).
Y de paso alcanzaron seis ganados seguidos fuera de casa, la más larga en la NHL esta campaña, junto con los LA Kings (6 GP del 26 de octubre al 15 de noviembre) y NY Rangers (6 GP del 28 de octubre al 15 de noviembre), además de ser la cuarta seguidilla ganadora en gira más larga en la historia del club.
Después de que los Sabres se adelantaron con el gol de Noah Ostlund a los 2:19 del primer periodo, los Blues respondieron con dos anotaciones, por parte de su capitán Brayden Schenn (5:08) y de Jimmy Snuggerud (8:09), para irse al primer intermedio con ventaja de 2-1, pero en el segundo lapso Alex Tuch se encargó de emparejar 2-2 el duelo a los 15:17 con su gol 12 de la campaña.
Pero apenas dentro de los dos primeros minutos del tercer periodo (1:46), Zach Benson rompió el empate que puso en ventaja definitiva a Buffalo, cambiando el rumbo del partido, maniatando a los locales a solo dos tiros a gol en el tercer lapso y limitándolos a solo 18 en general.




















