Con la pretemporada 2025-26 de la NHL programada para comenzar el 20 de septiembre, NHL.com/es presenta un análisis a fondo de cada equipo antes de que comience la acción. Hoy toca el turno a los Edmonton Oilers.
Desde el punto de vista positivo, se puede decir que los Edmonton Oilers cumplieron con su firme meta de al menos regresar a la Final de la Stanley Cup para darse una nueva oportunidad de pelear por el trofeo, aunque el desenlace de ese retorno a la serie por el título fue incluso más amargo que el de un año atrás cuando se recuperaron de una desventaja de tres juegos para forzar al séptimo duelo y perderlo por 2-1 en 2024.
El desenlace fue que Edmonton cayó en seis encuentros en la Final de la Stanley Cup de 2025 en contra de los Florida Panthers por segundo año consecutivo para quedarse en la orilla en un nuevo intento fallido de capturar una Stanley Cup, algo que no logra la franquicia desde 1990.
En aras de rescatar otro aspecto positivo, Edmonton ha llegado a tres de las últimas cuatro Finales de la Conferencia Oeste y solo en una no alcanzó la Final de la Stanley Cup, y todo ese se convierte en, al menos, un marco esperanzador de ser uno de los equipos más dominantes de la conferencia, pero probablemente en 2025-26 sea más complicado mantener ese estatus porque el resto de los competidores se ha reforzado en consecuencia.
Es innegable mencionar que este equipo llegará tan lejos como su capitán, Connor McDavid, los lleve. El ‘97’ vivió una temporada complicada, entre lesiones y una suspensión, que limitaron su participación a solamente 67 encuentros, aunque sumó su quinta campaña consecutiva con 100 o más puntos. El astro de los Oilers es sin duda uno de los mejores jugadores en la actualidad, para muchos el mejor, y aunque está en el aire su continuidad con el equipo, pues al término de la siguiente campaña se vence su contrato vigente, hay esperanzas de que renueve y siga más años en el norte de Alberta.






















