Final disputada
Los New Jersey Devils llegaron al duelo por la Stanley, en calidad de campeones defensores, luego de haber alzado la copa en el año 2000 tras imponerse en seis juegos a lo Dallas Stars. Su último obstáculo para lograr su segundo título en fila, era un Colorado Avalanche que tenía la motivación de su núcleo de veteranos, encabezado por Bourque.
El choque entre ambos clubes fue extremadamente físico, con batallas intensas por el disco en cada sector de la pista. Pero por encima de ello, destacó la presencia de quizás los dos mejores arqueros de la historia, pues Patrick Roy tuvo que lidiar con Martin Brodeur, quien actualmente, es el guardameta con más triunfos de todos los tiempos en la NHL.
La serie llegó empatada 1-1 al estado de New Jersey donde en el tercer choque, Bourque cobró un papel protagónico al capitalizar una secuencia de Power Play en la tercera fracción para poner arriba a Colorado, con el gol que terminó siendo decisivo en la victoria 3-1. El defensa consiguió su segundo punto del duelo ante los Devils, en el quinto partido cuando registró una asistencia.
Sin embargo Bourque necesitaría ayuda para cumplir su sueño, pues el Avalanche se encontraba contra la pared, abajo en la serie 3-2 y con el reto de tener que disputar el sexto choque nuevamente en la casa de sus rivales. Fue entonces, cuando apareció Patrick Roy, quien con 24 salvamentos completó la blanqueada 4-0 gracias al respaldo de tres puntos por parte de Adam Foote, para estirar la definición a un séptimo cotejo.
Unidad total
Y así llegó el 9 de junio de 2001.
Gracias a un doblete de Alex Tanguay y otro gol de Joe Sakic, el Avalanche tomó una sólida ventaja de 3-0 que, con el apoyo de Roy en la portería, pudo proteger para llevarse el séptimo choque. Sin embargo, Bourque fue el segundo jugador con más tiempo en el hielo en aquel partido, gracias 29 minutos y 35 segundos luchando por su sueño.
"Pensé que me iba a desmayar" Dijo Bourque en 2016 a NHL.com. Con el respaldo de dos ciudades; Colorado y Boston, donde el defensa pasó los primeros 21 años de su carrera y cuya afición observó los juegos ante New Jersey a través de la televisión, el jugador completó la meta de alzar la copa después del sonido final en lo que fue la victoria 3-1.
Los presentes en Pepsi Center sabían que el segundo título de Colorado era especial para una leyenda del hockey. Por tal razón, el capitán del Avalanche, Joe Sakic, le entregó la copa a Ray Bourque, quien con los ojos llenos de lágrimas y frente a pancartas que decían "Ray esto es por ti", alzó el trofeo más grande de todos los deportes profesionales.
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"Es una leyenda de este deporte, sentí que era lo correcto". Declaró Sakic a NH.com, en 2017 cuando la liga celebró su centenario, reconociendo a los mejores 100 jugadores de todos los tiempos, un listado que incluyó a ambos; Joe Sakic y Ray Bourque.
Durante esa misma ceremonia en 2017, Bourque tuvo palabras de elogios para Sakic en honor al momento vivido en 2001. "Joe tuvo un año increíble pero le dije que haberme pasado la copa aquel día, ha sido la mejor asistencia de su carrera".
La historia no terminó en Colorado y es que Bourque nunca olvidó su más de dos décadas con los Bruins, por lo que el 13 de junio de 2001 y tras conseguir la aprobación tanto del equipo, como de la ciudad, el defensa trajo la copa al ayuntamiento de Boston (City Hall) para celebrar ante más de 10 mil personas.
"Fue increíble poder regresar y festejar porque ellos saben dónde está mi corazón". Declaró Bourque a la cadena NBC en 2021, es decir, 20 años después de aquel momento.
