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Fue otra semana movida en las redes sociales de la NHL. Estos son los mejores momentos.

Para empezar, fue una semana interesante para el exjugador y actual analista en las transmisiones de los juegos de los Buffalo Sabres, Rob Ray.

Durante el primer período del partido del sábado entre Buffalo y los New York Rangers, Ray fue golpeado por el disco cerca del ojo mientras estaba de pie entre los bancos. Los médicos y jugadores de los Sabres lo revisaron, pero el comentarista les dio luz verde para seguir jugando. Más tarde, recibió puntadas para su herida por encima del ojo.

Para su siguiente juego el martes, Ray tomó precauciones. Trasladó su puesto de transmisión a las alturas del KeyBank Center por si las dudas. El analista, quien jugó 14 de sus 15 temporadas en la NHL con los Sabres, inició la transmisión previa al juego saludando desde la sección 327 de la arena, donde se sentó en el último asiento de las gradas.

"Estoy aquí arriba, muchachos, aquí arriba con todos mis amigos", dijo Ray a sus compañeros de transmisión. "En el centro de atención, en el lugar más alejado de cualquier acción sobre el hielo.”

Suter tiene celebración en familia
El domingo, cuando los St. Louis Blues recibieron al Colorado Avalanche, Ryan Suter celebró el haber alcanzado el hito de los 1,500 juegos en la NHL.

Previo al partido, como motivo de la ocasión, Suter fue acompañado en el vestidor por sus hijos Brooks, Avery y Parker, quienes anunciaron las alineaciones titulares para el encuentro.

Suter, sobrino del campeón de la Stanley Cup y ganador del Calder Trophy en 1986, Gary Suter, se convirtió en apenas el jugador número 22 en la historia de la NHL en alcanzar el hito de 1,500 partidos, logro que superó el pasado 7 de febrero.

El equipo le dedicó un video tributo a su extensa carrera, que incluyó etapas con los Nashville Predators, Minnesota Wild y Dallas Stars antes de unirse a los Blues el verano pasado.

Con dedicatoria especial
También el domingo, Alex Ovechkin dio un paso importante en su carrera para rebasar a Wayne Gretzky como el máximo goleador en la historia de la NHL.

El delantero de los Washington Capitals registró tres goles en el triunfo de 7-3 sobre los Edmonton Oilers para ponerse a solo 13 goles de superar el récord de goles de Gretzky (894).

Tras cada tanto, Ovechkin se aseguró de darle un choque de puños a un aficionado en especial, su hijo Sergei. Cuando consumó el Hat-Trick, mientras caían sombreros y gorras a la pista, el ruso dio una vuelta y completó la celebración con Sergei.

También estuvieron en el juego la esposa de Ovechkin, Anastasia, y su hijo menor, Ilya. Juntos, pudieron presenciar cómo Ovechkin se acercaba aún más a la historia.

"Significa mucho. A los niños les encanta el hockey", contó Ovechkin a TNT después del partido. "Conocen a todos los jugadores. Obviamente, jugar contra uno de los mejores equipos de la liga, con dos de los mejores jugadores ahí afuera... Es genial conseguir la victoria, es genial anotar un par de goles. Así que estoy seguro de que estarán felices”.

Un cumpleaños memorable
El sábado, en un emotivo momento durante el partido de los Columbus Blue Jackets contra los Chicago Blackhawks, la multitud de 20,000 aficionados en el Nationwide Arena se unió para cantarle "Feliz Cumpleaños" a Johnny Gaudreau Jr., hijo del fallecido delantero de los Blue Jackets, Johnny Gaudreau, en su primer cumpleaños.

Después de una breve presentación, Gaudreau Jr. apareció en la pantalla gigante de la arena mientras la afición estallaba en alegría. Luego, la voz de los Blue Jackets comenzó a cantar "Feliz Cumpleaños" para el pequeño, y tanto los aficionados de los Blue Jackets como los de los Blackhawks se unieron al canto. El pequeño Johnny, vistiendo una sudadera con la firma de su padre, aplaudió emocionado mientras la multitud cantaba.

Hermano chistoso
El jueves, el jugador de los Nashville Predators Ryan O'Reilly se tomó el tiempo para ir a apoyar a su hermano mayor en un día especial.

El delantero de Nashville sostuvo un divertido cartel para celebrar el partido número 1,000 de su hermano, Cal O’Reilly, en la AHL en el Allstate Arena de Rosemont, Illinois.

"Felicidades por tener menos dientes que yo", decía el cartel de Ryan.

Con la camiseta de los Milwaukee Admirals de su hermano puesta, O'Reilly mostró con orgullo el cartel contra el vidrio mientras su hermano se calentaba antes del partido de su equipo contra los Chicago Wolves.

"Creo que fue el primer partido en mi carrera en el que estuve en el vidrio con un cartel, pero me pareció bastante gracioso", expresó Ryan al sitio web de los Predators. "Salí ahí para hacer que se riera. Fue bueno".

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