¡Misión cumplida!
Pese a la ausencia de su centro principal Mark Scheifele, un partido discreto de Nikola Ehlers y el hecho de llegar literalmente hasta el último segundo abajo en la pizarra, los Winnipeg Jets, el mejor equipo de la ronda regular, ganando el President’s Trophy, sellaron una remontada de antología para vencer 4-3 a los St. Louis Blues en el segundo tiempo extra, logrando avanzar a la Segunda Ronda de los Playoffs de la Stanley Cup.
“Lo vimos ayer en Dallas. Nunca hay que rendirse y si bien permitimos dos goles al inicio del partido, el mensaje a los muchachos fue el seguir presionando sin parar.” Señaló el entrenador de los Jets, Scott Arniel. “Sé que tenemos jugadores claves fuera de acción, pero es imposible no contagiarse con el apoyo de esta afición que te inspira en todo momento. Además, los chicos saben que cuando pasan estas cosas, hay que dar un paso al frente cuando llega la adversidad”, agregó el estratega.
Ante más de 15 mil personas que llenaron el Canada Life Centre, el capitán Adam Lowry terminó vistiéndose de héroe cuando se abrió espacio frente a la portería rival para desviar un tiro de Neal Pionk e incrustar el disco en la red, con el primer gol de su carrera en los Playoffs de la Stanley Cup.
“Es algo increíble, porque para ser honesto no me había sentido muy bien con lo que había demostrado en esta serie”, señaló Lowry tras el partido. “Hablé con el entrenador y le dije que quería causar un impacto positivo y el me recordó que la clave está en ser fiel a tu estilo de juego, a confiar en las habilidades con las que se cuenta, peleando cada batalla. Afortunadamente, tuve la oportunidad de marcar la diferencia, eso es una meta que tenía pendiente”, agregó el delantero.
El triunfo le permitió a los Jets avanzar a la Segunda Ronda por tercera vez en la historia de la franquicia, siendo el quinto equipo que lo hace en calidad de defensor del President’s Trophy y a la vez, el tercer conjunto canadiense que logra superar la primera etapa de esta postemporada sumándose a los Edmonton Oilers y a los Toronto Maple Leafs.
“En este tipo de partidos, de verdad que jugar en casa, es una ventaja”. Señaló Lowry. “Durante los tres minutos finales del tiempo regular perdimos el miedo a perder y cambiamos eso por la inspiración de una afición que no se sentó después de ese gol (Perfetti) en el último segundo. Es increíble y algo que me llena de grupo por pertenecer a este grupo”.





















