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La historia de la National Hockey League es una de las más convincentes de los principales deportes profesionales. Cada semana, NHL.com/es te lleva al interior de la fundación y evolución de la liga, con episodios puntuales. En esta entrega, el viaje a través del tiempo, sirve para recordar al guardameta con más triunfos sobre una pista de hielo.

Cuando se trata de la portería, existe un universo de opciones para intentar determinar al mejor de todos los tiempos en esa posición. Desde la fundación de la liga en 1917, la anatomía y filosofía de los arqueros ha cambiado por lo que resulta muy difícil unir las épocas, aunque las estadísticas sirven de mucha ayuda.
Y es gracias a esos números, que se llega a Martin Brodeur, el guardameta con más victorias en la historia de la NHL, totalizando 691 triunfos para ser el único en ganar más de 600 encuentros. Para poder llegar a ese puesto, el tres veces campeón de la Stanley Cup, con los New Jersey Devils, tuvo que superar a leyendas como Terry Sawchuk, Jacques Plante, Tony Esposito y Patrick Roy.
Ése gran momento, en el que Brodeur se convirtió en el portero más con más triunfos en la historia de la NHL, llegó el 17 de marzo de 2009, cuando el arquero detuvo 30 disparos y ayudó a los Devils a vencer 3-2 a los Chicago Blackhawks ante 17.625 personas que se dieron cita en el Prudential Center en New Jersey.

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Crónica de una noche especial
Desde el inicio de las acciones, los locales le dieron un apoyo notable a su portero, pues en el primer período Jamie Langenbrunner abrió el marcador con el 1-0 para los Devils, en una jugada en la que Zach Parise, actual alero de los New York Islanders, recibió el crédito por la segunda asistencia. Posteriormente, Travis Zajac, con otro pase de Parise, aumentó la ventaja.
A los 16:56 del segundo período, New Jersey se vio en la necesidad de defender una penalidad, pero la desventaja de jugadores sobre la pista no impidió que Brian Gionta marcara el 3-0, luego de recibir una asistencia de Patrik Elias, quien de esa forma se convirtió en el líder en puntos de todos los tiempos con la camiseta de los Devils, llegando a 702 y siendo una posición que sigue vigente gracias a 1.025 unidades.

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No obstante, Chicago logró reaccionar y un joven Patrick Kane, actualmente delantero de los New York Rangers, armó la jugada que terminó en el primer gol de los visitantes a través de Cam Baker. Luego, a los 17:57 del tercer período, Dustin Byfuglien acercó peligrosamente a los Blackhawks con el 3-2.
Brodeur tuvo que sudar los últimos nueve segundos. Buscando el empate, Chicago pidió un tiempo muerto y obtuvo el control del disco en la zona de los Devils. Mientras corrieron los segundos finales, el delantero Troy Brouwer sacó un tiro que el arquero de los Devils detuvo con su pierna derecha, enviando el disco hacia la esquina y fue así, como el portero canadiense colocó a Roy, su ídolo de la infancia y miembro del Salón de la Fama, en el segundo lugar, para convertirse en el guardameta más ganador de todos los tiempos.
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Reacciones en el momento
"Es un poco difícil para cualquier atleta pensar que lo va a ser, obtener un récord como ese, especialmente en la portería", dijo Brodeur después de haber logrado la hazaña. "Nunca pensé que sería posible. Pero definitivamente, a medida que me acercaba más y más, sabía que eventualmente sucedería".
La celebración al final de aquel encuentro, fue la típica para Brodeur; un salto al aire, agitando la mano derecha con la que sostenía su bastón, en medio de una gran multitud que gritaba "Marty- Marty" como manifestación de apoyo al portero de 36 años en aquel momento. "Fue una noche emocionante y estoy feliz de que haya terminado así porque los últimos días han sido caóticos, pero definitivamente, una gran recepción por parte de los aficionados".
Pese a que los Devils terminaron la temporada 2008-09, cayendo en los Cuartos de Final ante los Carolina Hurricanes, la noche del 17 de 2009, el equipo celebró de forma similar a los años de 1995, 2000 y 2003, cuando ganaron la copa; Patinando en el centro de la pista, pero en esta ocasión, Brodeur no levantó un trofeo, sino que sacó unas tijeras y cortó la red de su arquería como símbolo de haber impuesto el récord.

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"Definitivamente es más difícil de lo que pensaba", bromeó Brodeur, cuyos compañeros le ayudaron a cortar la malla, para después dar una vuelta alrededor de la pista viendo hacia las gradas y saludando a su fiel afición, mientras los fotógrafos invadieron la pista para capturar la escena sobre el hielo.
Antes de lograr la hazaña, Brodeur empató la marca de Roy en un escenario emotivo, pues se trató de su ciudad natal de Montreal y ante la presencia de Patrick Roy en las gradas. "Pensé que lo que viví en Montreal fue muy bueno, pero esto lo superó". Su hito fue celebrado con unos aplausos se convirtieron en "Gracias, Marty" cuando el reloj avanzaba, y "Marty's Better" (Marty es mejor), una vez que el récord fue suyo.
"Este es uno de esos momentos realmente especiales que no se presentan con frecuencia", dijo el comisionado de la NHL, Gary Bettman, quien asistió al Prudential Center aquella noche en 2009. "Fuimos testigos de algo histórico aquí y los fanáticos lo reconocieron con muchas emociones en todo momento".
Carrera única
La victoria 552 llegó en el juego 987 de Brodeur con los Devils, equipo con el que disputó 21 temporadas, ganando el trofeo Calder como Novato del Año en 1994, cinco veces el Jennings Trophy como el arquero con la menor cantidad de goles permitidos, al tiempo en el que en cuatro ocasiones, se llevó a casa el Trofeo Vezina, tras ser reconocido como el mejor portero de liga.
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En 2017, cuando la NHL celebró su centenario y quiso reconocer a los mejores 100 jugadores de todos los tiempos, el nombre de Martin Brodeur apareció en la lista. "Creo que él hizo que sus compañeros se sintieran extremadamente confiados" Dijo Lou Lamoriello, quien fungió como Gerente General de los Devils durante las tres ocasiones que el conjunto alzó el campeonato de la Stanley Cup.
"Si esto continúa siendo divertido, me quedaré por mucho tiempo", dijo Brodeur en 2009 y así lo fue. Se retiró en la temporada 2014-15, después de siete partidos con los St. Louis Blues, con los que ganó tres juegos para totalizar 691 victorias, la mayor marca en una ronda regular, además de 125 blanqueadas, también la cifra más alta, superando las 103 registradas por Terry Sawchuk.
Por si fuese poco, Brodeur también es segundo con más triunfos en los playoffs, tras ganar 113 encuentros. "Me divertí mucho. Nunca quise poner presión extra sobre mí, por lo que pienso que pasándola bien e interactuando mucho sobre el hielo, logré cumplir mi meta". Dijo el arquero en 2017, tras ser reconocido como una de las mejores 100 figuras de todos los tiempos en la NHL.