Para los equipos contendientes, los objetivos para estas últimas semanas de temporada regular son claros. Primero, conseguir el mejor sembrado posible de cara a los Playoffs de la Stanley Cup, y segundo, terminar de afinar detalles en su juego para llegar a la instancia decisiva en un buen momento.
Para los Dallas Stars, este es un trabajo en progreso. A pesar de tener el tercer mejor récord de la liga (46-21-4, 96 puntos), siendo únicamente superado por los Washington Capitals (103 unidades) y los Winnipeg Jets (103), quienes están en una dura contienda por el Trofeo de los Presidentes, al mejor conjunto de la temporada regular, el conjunto texano aún debe perfeccionar en su dinámica, especialmente en la línea de Jason Robertson, Mikko Rantanen y Roope Hintz.
Precisamente esa es la línea que la directiva de los Stars visualizaba como la que marcaría el camino en los Playoffs de la Stanley Cup cuando adquirieron a Rantanen antes de la fecha límite de cambios. Y aunque hasta ahora no han terminado de encontrar el potencial esperado, el trío ha ido adaptándose con el pasar de los juegos.
Un ejemplo de ello llegó el miércoles, en el triunfo 4-3 sobre los Edmonton Oilers en el Rogers Place, que le otorgó a los visitantes una separación de cinco puntos sobre el Colorado Avalanche en la lucha por el segundo lugar de la División Central.
La victoria de los Stars sobre los Oilers fue un espectáculo que dejó mucho para el análisis. La noche del miércoles fue testigo de cómo la línea estelar de los Stars, esa que tanto se ha esperado, finalmente comenzó a mostrar su verdadero potencial, liderada por un Robertson imparable.
Robertson, quien ha sido una fuerza dominante desde el primero de enero, liderando la NHL en goles con 23, demostró su valía con un Hat-trick natural en el segundo período —tres tantos consecutivos. Este logro no sólo terminó asegurando la victoria de los Stars, sino que también lo colocó en los libros de récords, convirtiéndose en el 16vo jugador en la temporada 2024-25 en lograr un triplete de este estilo; la mayor cantidad en una sola temporada en la historia de la liga. Este hito es aún más significativo si consideramos que su compañero de equipo, Wyatt Johnston, también logró esta hazaña a finales de enero, marcando la segunda vez consecutiva que un jugador de los Stars consigue un Hat-trick natural.




















