Glen Gulutzan Introductory Press Confrence

Un regreso especial.

Tras ser eliminados por tercer año consecutivo en la Final de la Conferencia Oeste, quedó claro para los Dallas Stars, que era el momento de hacer un cambio. Después de todo, Jim Nill, ganó nuevamente el trofeo Jim Gregory, tras ser reconocido como el mejor Gerente General de la 2024-25.

Reemplazar a Peter DeBoer, no sería tarea fácil, teniendo en cuenta el éxito de la etapa del dirigente. Pero la repuesta a las interrogantes en las oficinas del conjunto texano, estaban más cerca de lo esperado, pues se trata de Glen Gulutzan, un técnico que no sólo debuto como entrenador en la NHL al frente de los Stars, sino que además, viene de formar parte del cuerpo de los Edmonton Oilers, el conjunto que ha eliminado a Dallas en la final del Oeste, durante las dos últimas postemporadas.

Han pasado 12 años desde que Gulutzan dirigió a los Stars, dejando marca de 64 ganados y 57 perdidos en dos temporadas con el club. El entrenador tiene ahora una experiencia mucho más amplia, en comparación con aquel hombre de 40 años que debutó como técnico en la campaña 2011-12. En su primera conferencia de prensa tras regresar al conjunto de Texas, el estratega dejó claro este cambio.

“Por las cicatrices. He estado allí, he cumplido con creces.” Fue la respuesta de Gulutzan al ser cuestionado sobre la razón de haber sido escogido por Jim Nill, para ocupar el mismo cargo por el que fue despedido hace 12 años. “En mi etapa como asistente técnico en Edmonton llegamos a dos finales, pero no ganamos y eso duele. Pero además, pude ser parte de un cuerpo que entrenó a algunos de los mejores jugadores del mundo. Forjamos relaciones con diferentes personas a lo largo de todos los partidos que disputamos.”

Head coach, Glen Gulutzan of the Dallas Stars at American Airlines Center on March 3, 2013 in Dallas, Texas. (Photo by Ronald Martinez/Getty Images)

La experiencia en el carácter de Gulutzan fue notable. “Llevo unos 100 partidos de playoffs ahora y uno pierde la cuenta, pero en esos juegos es como si tuvieras un récord de 5-1 porque todos están concentrados. Hay que hacer ajustes. De joven, no hacía muchos ajustes. Sabía jugar solo una vez. Uno es autodidacta, uno aprende por sí mismo. Ahora, con toda esa experiencia, cumples muchos requisitos.”

Desde la perspectiva de Jim Nill, como Gerente General, las palabras de Gulutzan están alineadas a lo que fue una extensa búsqueda para encontrar al entrenador indicado. “Revisamos una larga lista. Seguimos el proceso. Parte de mi trabajo como consiste en evaluar constantemente a otros equipos y lo que están haciendo y el nombre de Glen siempre había surgido en nuestras conversaciones. Estuve en el 4 Nations Face-Off con algunos de los mejores jugadores del mundo y su nombre surgió. Es un joven que ha cumplido con su deber y ha ascendido.”

Enfocado en el plan de trabajo

Si bien la NHL se encuentra en su receso de temporada, esta no parece ser la mentalidad de Gulutzan, quien ya tiene visualizado lo que busca hacer. “Lo que me gustaría hacer aquí es mejorar un poco nuestra agresividad a un nivel mayor tras 82 partidos. Porque no se puede activar en el partido 83. Hay que ir construyendo. Así que vamos a ir construyendo, pero no correremos por ahí. Tenemos demasiados buenos jugadores. Pero tiene que haber un componente físico.

Sobre su plan estratégico, el entrenador destacó la necesidad de mantener el enfoque. “Dondequiera que pongas tu energía en esta liga, ahí es donde se consigue el impulso y vamos a poner un poco de energía en ser más agresivos porque así es este deporte. Y creo que eso nos ayudará. Algo que me gustaría hacer es añadir esa capa aquí, y tiene que empezar desde ya”.

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Parte de esa mentalidad agresiva, se debe a su experiencia reciente entrenando a jugadores como Connor McDavid y Leon Draisaitl. “Para ser honesto, ellos me hicieron mejor porque sus mentes son de élite. Me hicieron mejor. Me retaron como técnico para asumir un desafío diario. Así que, les aseguro que un dirigente siempre tiene oportunidad de crecimiento”.

Una vez más, el gerente Nill respaldó la filosofía de Gulutzan. “Han pasado muchas cosas buenas aquí, él lo entiende. Hay que hacer algunos ajustes. Otro aspecto interesante es que ha jugado contra nosotros en las dos últimas finales de conferencia. Nos conoce como la palma de la mano. Conoce nuestras fortalezas y debilidades y está deseando hacer esos ajustes.”

Para un hombre de retos como Glen Gulutzan, la temporada 2025-26, será un nuevo desafío, pues se trata de dirigir a un equipo que se ha quedado a las puertas de llegar a la Final de la Stanley Cup, siendo una potencia en la División Central y que ha coqueteado con ganar el President’s Trophy (mayor cantidad de puntos en la ronda regular). Además el club está compuesto por estrellas de élite de la talla de Mikko Rantanen, Jason Robertson, Jake Oettinger y Roope Hintz, sólo por nombrar algunos.

“Hay que forjar relaciones y cualquier buena relación empieza con la confianza. También hay que saber de qué se habla, porque las opiniones se filtran con bastante rapidez. Al final, lo que hay que hacer con todos los jugadores es generar confianza. Confiar en que se intenta ayudarlos, en que se sabe lo que se hace y, una vez que eso se pone en marcha, se puede lograr una verdadera colaboración.”

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