La estrella de la NBA se familiarizó con la Stanley Cup antes del estreno de un nuevo episodio de su programa "The Shop".
El alero de Los Angeles Lakers demostró que no creía en supersticiones cuando tocó el icónico trofeo. Muchos jugadores, entrenadores y fanáticos piensan que es mala suerte tocar la Stanley Cup, hasta que la hayas ganado oficialmente y puedas alzarla al final de la temporada.